2 jul 2009

I'll drink your blood tonight

I'll drink your blood tonight

Siempre te voy a gustar. Sin embargo mi condena es vivir eternamente en eso. Y por eso, beberé tu sangre esta noche.

Te encerraré en el castigo que estoy viviendo. No se te otorgará el sueño eterno. No sobrevivirás a la luz del día.

¿Pero porque? ¿Qué hiciste para merecer eso?

Simple

Me defraudaste amor.

Y a los vampiros jamás se les defrauda Me decepcionaste y derribaste la fortaleza que había construido. Lograste entrar en mi muerto corazón. Y me defraudaste.

Así que la fortaleza de orgullo se convirtió en venganza. Venganza pura. Venganza de verte sufrir como yo sufrí. Venganza. Aquella sensual seductora. Aquella que mata el alma, y dicen, también la envenena. Es un lujo que yo merezco. Ya que carezco de alma. ¿No crees? Y si me matara, pues lo haría aun más fervientemente.

Te convertiré en un ser de la noche y beberás sangre de inocentes para subsistir. El Sol será tu peor enemigo.

Pues me defraudaste y derramé lágrimas de sangre. Y esa sangre, será la misma que correrá por tus venas.

Serás el más temido de los depredadores. ¿No te parece es? Es lo que siempre quisiste. ¿No? Ser temido y respetado. ¿Oh no amor? Respirarás miedo por dondequiera que pases. Eres la muerte y seducción en persona. Se te admirará y temerá por igual. Te condeno a ser presa de todo eso. Se que suena como el más tierno de los paraísos, pero el precio de eso es muy caro. Vivirás eternamente y década tras década, tras siglo, tras siglo; vivirás el cambio de épocas. Te volverás en un ser obsoleto y aún más mitológico de lo que somos ahora. Vivirás en secreto y preservaras ese secreto.

Haré que te arrepientas de cada cosa que me hiciste, de cada lágrima que derramé. Desearas nunca haber nacido. Desearás nunca haberme conocido.

Convertirte en vampiro será mi cruel venganza.

Dulces sueños amor.

Disfrútalos mientras puedas. Pues esta noche beberé tu sangre.

Sin Titulo

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¡Tienes los ojos más hermosos que he visto!” Es lo que siempre me dicen. Y después es la misma historia,

-Soy ciego.

-Oh. Perdóname. ¡Es que no pareces! Discúlpame, no fue mi intención ofenderte.

Y de ahí, bajan la cabeza, avergonzados, y se marchan. Al menos, eso creo que hacen. Espero que hagan eso.

Dirán que soy cruel. Pero es mi pequeña venganza hacia aquellos que si ven.

Y entonces, dirán que ellos no tienen la culpa. Yo tampoco. Y sin embargo, yo soy el ciego.

Ellos no aprecian lo que pueden ver. Ellos seguían únicamente por las apariencias y no aprecian verdaderamente las cosas. Supongo que ese el precio por tener ojos. Cuando era más pequeño, mi mamá solía contarme historias de como era el mundo.

En ese entonces, el cielo era lila con tonalidades rosas. Las nubes eran azules, y sí tenía hambre me las podía comer. Si estaba triste, el cielo se nublaba. Y cuando me enojaba, él lloraba. Los árboles eran de muchos colores y ahí vivían las criaturas más fantásticas. El agua era plateada y a veces sonreía.

Pero yo era ciego, no sordo. Ni tonto. A mi padre siempre le gustó ver las noticias. Nunca escuché que el cielo estuviera más lila que otras veces, o que el árbol que la lluvia derribó fuera azul. Sin embargo, escuchaba algo sobre guerras. No me gusta esa palabra. No la comprendo. No comprendo al mundo. ¿Es que acaso necesitamos los ojos para ver aquello que no nos pueden describir?

¿Es tan dulce el amor? ¿Es tan cruel? ¿Es tan malo? ¿Es bueno? No se como sea el amor. Recuerdo que alguna vez lo sentí. Hacia mis padres. Pero después ellos murieron.

Alguna vez, espero, que antes de morir, pueda ver al amor.

Le preguntaré si alguna vez existió o es solo una ilusión.